sábado, 15 de enero de 2011

Todos a la palestra para defenderse

Sigue pasando el tiempo y la vida sigue igual, o peor incluso. La agitación institucional que vive el Betis en los últimos tiempos en digna de una telenovela interminable. Entendida esta como episodios diarios que se emiten habitualmente de lunes a viernes, narrando historias de alto contenido melodramático como los que viven los béticos todos los días (incluidos fines de semana) desde hace ya algún tiempo. La historia de los fines de semana va sorprendentemente mejorando gracias al buen hacer de la plantilla y cuerpo técnico, que aislados de todo la atmósfera negativa que rodea a la entidad se centran en su trabajo como profesionales por el bien del club. Mientras tanto, los que mandan y también los que no, hacen y deshacen sólo con el único objetivo de ganar dinero a costa del Betis, y queriendo ser los héroes para la admiración del aficionado. Además lo que hacen es: venir, robar y luego irse (eso sí, echándoles antes, porque con todo el dinero que cogen normal que no quieran marcharse).

Oliver, quería un cambio en el club de cabo a rabo y así lo hizo. Cambió el nombre del estadio, de la ciudad deportiva, renovó el museo y hacia descuentos en los precios de las entradas de los partidos de liga para ganarse a una afición que no se creía nada. En el último partido al frente de la entidad, llevo al palco al mismísimo Mario Conde. Reconoció el empresario navarro, que el polémico Conde sería una pieza importante en este 'nuevo Betis' que quería hacer, ya que traería mucho dinero a las arcas del club. Tras la junta extraordinaria celebrada en el mes de Diciembre se nombró a Rafael Gordillo como presidente del Real Betis Balompié, tras ser elegido por la juez Mercedes Alaya como administrador judicial de las intervenidas acciones de Manuel Ruiz de Lopera.

A cargo de José Antonio Bosch los actuales miembros de la directiva han salido a explicar la situación económica del Betis. En esta rueda de prensa se atacó a Bitton Sport. Se dice que este grupo empresario se ha llevado 1'5 millones de euros del Betis. Un saqueo (así lo ha calificado la actual directiva) en el que se dice que hay pagos realizados por trabajos ‘extraños’. Algunos de ellos son: pago a intermediarios por la gestión contratos a los jugadores que sólo han hecho subir el salario a los jugadores, facturas pendientes sin contabilizar por importe de 120.000 euros en las que no se indica el concepto (ni siquiera se dice qué contrató el Betis) ó los gastos de desplazamiento de la empresa Orion (empresa mercantil) se metían como desplazamiento de las categorías inferiores. Si ya antes sonaban a risa muchas de las palabras de Oliver, ahora sabiendo esto aún más.


Pero la reacción no se ha hecho esperar y el empresario navarro ha salido a la palestra ante tal acusación de las personas que ahora están en la entidad. Las ha calificado de analfabetas en el tema deportivo, y no ha dudado en colgarse medallas en cuanto a los fichajes que se hicieron durante su etapa y la plantilla que ha construido. Ha salido defendiendo uno por uno los puntos de los que se les acusaba junto con Ángel Vergara, Eduardo Peña, Jaime Rodríguez Sacristán y Joaquín Zulategui. Entre otras cosas, Oliver ha defendido las comisiones pagadas por Mehmet Aurelio y Sergio García, así como ha acusado a Gordillo de pagarlas en su etapa como director deportivo y ha anunciado demandas al actual consejo.

Esto es algo ya que aburre a todos los aficionados, la novela interminable. Y que para enterarse de todo lo que rodea la actualidad verdiblanca van a tener que hacer un cursillo acelerado de derecho. ¿A quién van a creer los béticos si todos los que se hacen cargo del club les van engañando? Pues mejor a nadie, mejor.

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