jueves, 26 de noviembre de 2009

El Betis de los béticos


El Real Betis Balompié desde su nacimiento, 12 de Septiembre de 1907, ha vivido momentos buenos, regulares y otros no tan buenos, pero todos ellos llenos de gloria y de gran beticismo. El Betis para los béticos es mucho más que un escudo y que una bandera, es un forma de vivir, por eso más allá de la frontera siempre habrá alguien que diga “Viva er Beti manque pierda”. La historia de esta frase, es una de las más bonitas para comprender qué es el Betis.

La temporada 1942-1943 empezó en primera división, pero poco a poco el equipo empezó a caer tanto deportiva como económicamente hasta consumarse el descenso a la tercera división en la temporada 1946-1947. Cualquier club en una situación similar a la que viviría el Betis durante los siete años siguientes haría que desapareciera para siempre.
Sin embargo, supo solventar las dificultades y seguir adelante. Fueron años de crisis económica y deportiva, en la que la sociedad se mantuvo únicamente gracias al entusiasmo y sacrificio monetario de un reducido grupo de hombres. Para solventar los desplazamientos tanto de jugadores como aficionados, se realizaron subastas y ventas de bocadillos en las inmediaciones del campo del Real Betis. Así, más que nunca, las derrotas vinieron unidas a la esperanza, y el grito de “¡Viva er Beti manque pierda!” que se hizo famoso en Sevilla, en Andalucía y en toda España.

En el año 1955 apareció el ilustre Benito Villamarín. Fue presidente de la entidad verdiblanca durante 11 años, hasta que una larga enfermedad se le llevó por delante, en los que devolvió al equipo a primera división y recuperó su carisma.

Se consiguió el segundo título de la historia en el año 1977, que sería el más especial. El 25 de Junio de ese año el partido que enfrentaba al Athletic Club de Bilbao y al Real Betis Balompié, con 30.000 vascos en la grada frente a 7.000 béticos, hacia presagiar que el Betis se fuera de vació para casa. Pero no fue así. El Real Betis se proclamó campeón de la Copa del Rey tras imponerse en la tanda de penalties. La Plaza Nueva se colapsó para recibir a sus jugadores y celebrarlo por todo lo alto.

El momento más crítico de la historia del club llegó cuando en 1992, nadie quería poner un duro por salvar la entidad. Pero cuando el club estuvo a punto de desaparecer, la figura del salvador Manuel Ruiz de Lopera y Ávalos se hizo presente poniendo el aval necesario.






Con él en el mandato, el Betis ha llegado a una final del Copa del Rey (1997), se ha ganado otra Copa (2005), y ha sido el primer equipo andaluz en participar en la máxima competición europea, la Champions League. Pero su cargo en el club esta muy quemado, la gente cada vez esta más harta de que no deje hacer nada a nadie, que sea él el manda más. Igual que hubo momentos de gloria, ahora mismo el Betis vive momentos de gran convulsión. Se ha vuelto a descender, y ocupar la undécima posición en la Segunda división a estas alturas no resulta nada esperanzador. Se han producido manifestaciones como la del 15-J, donde acudieron 60.000 béticos a pedir la marcha de Lopera, ya que es acusado entre otras muchas de utilizar el Betis para intereses propios, aunque siga en sus trece de que esto no es así. Lo mejor, para el Betis y para los béticos, es que Lopera abandone el barco que tanto ama y deje que "otros" de una vez por todas hagan las cosas. Los béticos se lo agradecerán de verdad.

jueves, 12 de noviembre de 2009

Unos sí, y otros ¿por qué no?

La violencia en los estadios de fútbol de españoles es un hecho que con el paso del tiempo se esta viendo incrementado a pasos agigantados. Hace pocos años nos llegaban imágenes desagradables de otros países (donde el fútbol se vive con desmesurada pasión) y nos veíamos sorprendidos por la violencia que se empleaba, pero poco a poco nos estamos poniendo a una altura que se torna peligrosa y que hace plantearse la cuestión de si lo vemos ya como algo habitual, ó solo hasta hace unas fechas. Más adelante espero aclarar estas dudas, y poner en duda a los organismo que sancionan estos sucesos.

Estas personas, denominados "los cuatro de siempre", molestan en todos los sitios y en todos los estadios. Pero cierto es que algunos equipos "pagan el pato" por culpa de estos violentos y otros, sin embargo, no.

Influye mucho el estadio donde ocurra el hecho violento. Basándonos en pruebas, en Noviembre de 2002 cuando el jugador portugues Luis Figo volvía a pisar el cesped del Camp Nou con la camiseta del eterno rival (Real Madrid). Al disponerse a lanzar un saque de esquina le cayó de todo: botellas de plástico (llenas y vacías), una botella de J&B, bolas de golf y de billar, teléfonos móviles y hasta una cabeza de un cochinillo. Por suerte, nada impactó contra el futbolista. El partido se suspendió momentáneamente, llegando a retirarse los jugadores al túnel de vestuarios, para posteriormente continuar hasta el final del partido. Las consecuencias que trajeron estos lamentables incidentes fueron: dos partidos de cierre al Camp Nou y sanción de 4000 euros. Pero se trataba del F.C. Barcelona, y tras más de dos años la RFEF se pronunció y sólo mantuvo la sanción económica. El cierre del estadio quedó en el olvido.

En el estadio Santiago Bernabéu, en el partido correspendiente a los octavos de final de la Copa del Rey, edición 2006-2007, el lanzamiento de objetos contra el ex-portero bético Toni Doblas fue masivo por entender, aquellos que arrojaban todo tipo de objetos contra el guardameta, perdida deliberada de tiempo al sacar de portería en sucesivas ocasiones. ¿Que querían que hiciera cuando su equipo lleno de suplentes estaba elimando al Real Madrid en su propio campo? En fin, inexpicable. Pero mientras tanto, un botella impacto en el brazo del juez de línea. El partido se paró por esto hecho, y posteriormente se reanudó. Consecuencias: apercibiemiento de cierre.

En la siguiente eliminatoria de la Copa del Rey, el bombo deparó el derbi andaluz que enfrentaría a Betis y Sevilla, disputándose este en el Manuel Ruiz de Lopera. Se produjo el lamentable incidente en el que el entrenador del Sevilla, Juande Ramos, fue alcanzado por una botella que contenía líquido cuando el técnico celebraba el gol de su equipo. El partido fue suspendido a falta de 25 minutos.

Ese tiempo restante se jugó en el estadio del Getafe. Consecuencias: cierre del estadio por tres partidos.
Poco después y en el mismo escenario el portero visitante del Athletic de Bilbao, Armando, fue alcanzado con una botella impactándole en el ojo. El encuentro fue suspendido en el mintuo 70 cuando el Real Betis perdía por 1-2. Consecuencias: cierre del estadio por dos partidos, y la no reanudación del encuentro.




Estos hechos hacen plantaearse si lo que se castiga es la puntería o al equipo. Si se castiga al equipo, refiriendose con esto si representa a más o menos masa social o si hay más intereses o menos, sería triste. Pero sería aun más si lo que se castiga es la puntería, esto sería un hecho bochornoso por que se estaría ocultando la violencia.

Veremos que sucede con la acaecido el pasado fin de semana en el duelo disputado entre Atlético de Madrid y Real Madrid, en el estadio Vicente Calderón, donde Manuel Pellegrini fue alcanzado con un pequeña piedra en la nariz. El club rojiblanco ya está apercibido de cierre por hechos violentos. ¿Se castigará la puntería o al equipo?. ¿Como será tratado por la LFP, RFEF y Comité de Competición?.

jueves, 22 de octubre de 2009

La crisis del Atlético: ¿Dirección deportiva o entrenador?.

La situación del Atlético de Madrid ha llegado a su punto más álgido tras las últimas derrotas ante Osasuna en el Reyno de Navarra, y Chelsea en Stamford Bridge donde ha acumulado siete goles en contra por ningun tanto a favor. Es cierto que estos partidos se han disputado lejos de la ribera del Manzanares, pero es inconcebible que un equipo que cuenta en sus filas con Forlán, Kun Agüero, Maxi y Simao, no haga un tanto en la meta rival.

Estas derrotas han sido el detonante de una situación deportiva nefasta que viene arrastrando el equipo desde principios de temporada, donde no ha sido capaz de ganar a rivales como Racing de Santander y Almería en el Calderón.

Tras la destitución de Javier Aguirre, el técnico de Velada (Abel Resino) se hizo cargo del equipo y metió al equipo en puestos de Liga de Campeones(objetivo fijado por la directiva). Pero el equipo por entonces transmitia ilusión y ganas. Parte de ese mérito, o mejor dicho, la gran mayoría de este hay que atribuirselo al que fue el máximo goleador de la temporada pasada, Diego Forlán, que consiguió nada más y nada menos que 33 goles la temporada pasada convirtiendose en pichichi. Tener un jugador de estas características es un seguro de vida, y para Abel fue algo más que eso. Se agarró y con fuerza a la calidad del charrúa para continuar en el cargo, por que si no llega a ser por los goles del jugador uruguayo el Atlético no estaría disputando esta temporada la Champions League.

Con la llegada de Abel Resino a la ribera del Manzanares, el equipo apenas varió la disposición táctica y menos aún varió su juego. En el aspecto táctico tan sólo introdujo la novedad de adelantar líneas con una defensa frágil y lenta (Pernía, Pablo, Antonio López etc.). En el partido de su debut como técnico rojiblanco varió en el once titular tan sólo un jugador con la alineación habitual del ex-entrenador mexicano. Se preveía, como cuando un entrenador nuevo llega al banquillo, una revolución, que con el paso de los partidos hasta el final de temporada se vió que no era así, ya que los jugadores y el sistema de juego eran similares a los empleados por el técnico azteca. El técnico fue "salvado" por los goles de Diego Forlán. Mucho tiene que ver el rendimiento del charrúa en la situación rojiblanca, ya que este año en liga con tan sólo dos goles en ocho partidos, hace presagiar que Abel Resino no se va a salvar de la quema como la temporada anterior.


Basándose en los resultados conseguidos hasta la fecha podemos extraer que: se ha conseguido tan sólo un punto de nuevo posibles en la Liga de Campeones, y seis puntos en el campeonato nacional de liga ocupando puestos de descenso. El plantel rojiblanco cuenta en sus filas con jugadores lo suficientemente válidos para hacer mejores números. Jugadores que son o fueron internacionales como: Kun Agüero y Maxi (Argentina), Forlán (Uruguay), Juanito, Reyes, Pernía y Antonio López (España), Ujfalusi (República Checa), Simao (Portugal), Sergio Asenjo, Raul García y Jurado (España sub-21). Quizá no sean los mejores jugadores del mundo, pero seguro que con esta plantilla se podría mejorar el rendimiento actual de la misma. Y por ello quien debe hacer que un jugador sea mejor transmitiendole día a día tranquilidad, seguridad, confianza y motivándole, es un entrenador cualificado. Y a día de hoy, Abel Resino no reúne ninguna de estas condiciones.

El pasado del actual técnico rojiblanco no es nada halagüeno. Siendo técnico del Levante en la Segunda División Española fue destituido en la octava jornada tras conseguir un punto de veinicuatro posibles. Estos datos unidos a una situación tan drámatica y desconocida para el Atlético de Madrid en los últimos tiempos hace urgente una decisión de la directiva por el bien de la entidad.
Otros, sin embargo, piensan que la situación actual del Atlético de Madrid es culpa de la directiva.